La debilidad muscular y dolor en los huesos son los principales síntomas de osteomalacia. El tratamiento para esta enfermedad implica la reposición de niveles bajos de vitamina D y el calcio y el tratamiento de los trastornos subyacentes que pueden estar causando las deficiencias.
¿Cuáles son los síntomas de la Osteomalacia?
En las primeras etapas, es posible que no tenga síntomas, aunque los signos de la osteomalacia pueden ser evidentes en imágenes de rayos X u otras pruebas de diagnóstico.
Si la osteomalacia empeora, puede experimentar dolor en los huesos y debilidad muscular.
El dolor asociado con la osteomalacia afecta más comúnmente a la zona lumbar, la pelvis, las caderas, las piernas y costillas. El dolor puede ser peor en la noche, o cuando usted está poniendo peso sobre los huesos afectados.
La disminución del tono muscular y debilidad en las piernas puede causar dificultad para caminar.
¿Cómo prevenir la Osteomalacia ?
La osteomalacia puede ser causada por la exposición solar inadecuada o una dieta baja en vitamina D, por lo que a menudo se puede prevenir. Aquí están algunas sugerencias para ayudar a reducir su riesgo de osteomalacia en desarrollo:
Coma alimentos ricos en vitamina D. Estos incluyen los alimentos que son naturalmente ricos en vitamina D, como el pescado azul (salmón, caballa, sardinas) y yemas de huevo. También busque alimentos fortificados con vitamina D, tales como cereales, pan, leche y yogur.
Tome suplementos, si es necesario. Si usted no obtiene suficientes vitaminas y minerales en su dieta o si tiene una condición médica que afecta a la capacidad de su sistema digestivo para absorber nutrientes de forma apropiada, pregunte a su médico acerca de tomar un suplemento de vitamina D y suplementos de calcio.
Aunque la falta de exposición al sol está vinculado al desarrollo de la osteomalacia, pasar tiempo en el sol no puede actualmente ser recomendado para la prevención o tratamiento. Esto se debe a que no está claro la cantidad de sol que se necesita para prevenir o tratar la osteomalacia y la exposición al sol sin protección puede aumentar su riesgo de cáncer de piel. Actualmente no hay consenso entre los expertos sobre qué cantidad de exposición al sol es segura.
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